Fernando Ortiz. La transculturalidad y las dinámicas actuales.

Llevó 2 días viajando por Contrapunteo Cubano del tabaco y el azúcar de Don Fernando Ortiz. Es un libro que había leído hace más de 25 años, cuando la palabra transcultural llego a mis oídos. Recién terminaba mi Ingeniería en Controles automáticos, entonces el teatro y el cine constituían pasiones en mi vida juvenil. No creo haber estado preparado para entender toda su fina lección.

Desde que comencé a esbozar El modelo transpositivo de saberes contextualizados para la formación de los gestores culturales, dos palabras me han estado rondando como guardianes y acicate, ellas son: Trasculturalidad y Transdiciplinaridad. Adentrarme en un análisis de estos términos en un blog sería una tonta pretensión. Prefiero entonces hacer unos breves comentarios.

Cuando Malinowski elogia con tanto entusiasmo al sabio cubano Fernando Ortiz es porque, en esa época y en esos predios académicos, el planteamiento de nuestro insigne pensador era muy bien aceptado. Luego, a pesar de llevarlo en nuestras bocas, no creo hallamos profundizado mucho en las actualizaciones requeridas, solo recuerdo a Carpentier siendo incisivo en esto y extrapolando el término a las dinámica urbanas.

De entonces a acá ha llovido mucho y lejos están las goletas y el trasiego de esclavos, con su consiguiente trasiego de culturas. Más es evidente que el fenómeno sigue ocurriendo, algunos como Nestor Garcia Canclini hablan de hibridación cultural. En los últimos años los franceses se adscriben a la trasdiciplinaridad como manera de mirar desde la pedagogía y la ciencia los fenómenos de formación del hombre moderno. Ello los lleva reconocer a Edgar Morín, he leído recientemente El manifiesto de la Transdiciplinaridad y de nuevo encuentro ecos de Don Fernando.

Siento un sano orgullo cuando esto pasa, es por eso que me afinco cada día más en mi investigación. Creo modestamente que ella daría una nueva mirada a esta historia y permitiría a nuestros pedagogos incorporar conceptos como los de representaciones sociales e imaginarios culturales pero desde la rica tradición investigativa y creadora cubana.

Sigo leyendo con intencionalidad, pronto abundaré más...